Recuerdo que, cuando en la escuela me presentaron a Goya y a sus grabados,
no supe muy bien qué era aquello de grabados. A mi sencillamente me parecían
dibujos en tinta negra. Nadie me lo explicó, y yo, que era una chica tímida,
tampoco pregunté. Fue años más tarde, fruto del camino que fue tomando mi formación,
que conocí en profundidad el maravilloso mundo del grabado.
Me he ido encontrando con personas a lo largo de mi vida que no tienen muy claro
qué es el grabado, y no puedo evitar preguntarme por qué una técnica que fue
tan importante en la difusión del conocimiento es tan ignorada por los sistemas educativos.
El grabado es una técnica consistente en crear incisiones en una superficie y,
una vez entintada esa superficie, y quedando la tinta en esas incisiones,
permite la reproducción múltiple de lo que se ha representado.
Se trata de una técnica con grandes posibilidades artísticas, y que puede ofrecer
muy buenos resultados. Como ejemplo, me gustaría mostraros dos grabados
que realicé hace un tiempo, y que he utilizado en el diseño de mis
últimos productos.
en el pintor Caspar David Friedrich. Uno de los temas recurrentes de este artista
era la experiencia subjetiva del hombre ante la naturaleza.
Precisamente, en estos grabados, intenté apelar a esa subjetividad con la que,
en ocasiones, podemos enfrentarnos a la grandiosidad de nuestro planeta.
¿Qué os sugieren a vosotros estos dos grabados?